Llevar adelante una vida sana y al mismo tiempo poder darse todos los gustos es difícil pero no imposible. Para lograrlo es necesario encontrar un equilibrio en todo lo que consumimos y en las actividades que realizamos.
La alimentación es uno de los puntos más importantes para tener en cuenta, y para esto es fundamental corregir y controlar los excesos, pudiendo por ejemplo, comer alimentos sanos durante la semana, y disfrutar comidas ricas cuando tenemos un cumpleaños, reunión con amigos, o salidas a algún lugar. Acompañado de una buena alimentación, con todas las proteínas y nutrientes necesarios para el cuerpo, tiene que haber una rutina de actividad física, por lo menos dos veces por semana, ya que el ejercicio reduce los niveles de estrés, brinda más seguridad y eleva la energía. De lo contrario, va a ser difícil encontrar ese equilibrio del que hablamos.
Por otro lado, hay que poder establecer prioridades y fijar los objetivos que se tienen que lograr cada día. De esta forma se genera un orden mental, realizando las tareas y actividades por orden de prioridad, no dejando de hacer nada de lo que queremos y debemos.
A su vez, hay que ser muy cauteloso con el trabajo. Entendemos que casi nadie puede estar sin trabajar, es algo que necesitamos y muchas veces dignifica a las personas. El problema está cuando tenemos un exceso de trabajo y dejamos de hacer cosas que nos gustan, no tenemos tiempo para dedicarle a nuestros amigos y familia, y dejamos de lado actividades extracurriculares que tan bien nos hacen. Por eso, si queremos disfrutar de una vida equilibrada y saludable, lo ideal es poder programar tiempo para actividades de disfrute en nuestros planes diarios, y así despejar la cabeza. Esto puede organizarse mediante un cronograma de actividades, por ejemplo.
Todo esto es posible de lograr, simplemente hay que buscar un equilibrio en las actividades profesionales y vida personal haciendo un gran esfuerzo, con determinación y constancia, para poder ver buenos resultados que se van a ver reflejados no solo en el cuerpo y mente, sino también en el alma.