Además de hacer resúmenes, estudiar, hacer trabajos prácticos, realizar investigaciones, entre otras metodologías de estudio y aprendizaje, hay formas alternativas para aprender y esta es a través de la propia enseñanza.
Cuando los alumnos se ponen en el papel de los maestros, retienen la información de manera significante. Es por eso que muchas veces al formarse grupos de estudios, es común que los mismos compañeros se expliquen entre ellos adquiriendo el rol de profesores, porque al repetir lo leído una y otra vez, se entiende mejor y surgen dudas que pueden resolverse en equipo.
Asimismo, hay casos en los que el profesor les pide a sus alumnos alguna exposición oral sobre un tema en particular, para que toda el aula los escuche y tomen nota. Esto también es muy eficiente porque para realizarlo necesitan de organización previa, preparación de posibles preguntas y respuestas, investigación, para luego brindar toda esa información a sus compañeros.
Ingrid Mosquera Gende, profesora de la Universidad Internacional de La Rioja, considera muy importante que sus alumnos sean participes activos en el proceso de enseñanza. En relación a esto, comenta que cuando empezó a investigar distintas maneras de llevar a cabo este método, se encontró con que era algo que ya se había puesto en práctica en algunas entidades educativas.
Algunas de las experiencias que Ingrid destaca al haber investigado son las siguientes:
- En el colegio Ábaco, los alumnos de Primaria proponen sus propios problemas de matemáticas para los compañeros.
- En el colegio Los Sauces, los estudiantes de cuarto año recorrieron todos los cursos, inferiores y superiores, para explicar a sus compañeros la Constitución de 1978.
- En el colegio El Regato, los alumnos de Bachillerato enseñaron a los más pequeños todo lo relacionado con el mundo de las abejas, por medio de talleres.
- En el Instituto Superior de de Formación Docente 127, los estudiantes de grado de profesorado de inglés, matemáticas y lengua brindan apoyo a estudiantes en riesgo de exclusión social, económico o académico, de entre doce y diecisiete años, durante todo un curso académico.
- En diferentes universidades, como las de León, Salamanca, Barcelona o Granada, existen proyectos de tutorización, evaluación entre pares, trabajo en grupo o exposición de temas a los compañeros.
Lo interesante, es que como leímos en los casos que encontró la profesora, esto no solo es una forma de seguir aprendiendo sino que a la vez los chicos brindan apoyo escolar a quienes lo necesitan, ¡lo cual es muy valioso! Al ser los mismos estudiantes quienes exponen información y enseñan, pueden notar que todo lo que han aprendido tiene una finalidad práctica, pueden interactuar y comunicar sintiéndose útiles y serviciales con los demás.
Si te interesó la idea, podes crear tu anuncio de Apoyo Escolar en nuestro sitio. ¿Qué esperas? ¡Es una gran oportunidad!